Esta entrada ha sido posible gracias a Beatriz Díaz (Gracias)
Las siguientes fotografías y textos pertenecen al Museo Virtual de Ecología Humana
Higiene doméstica: paisaje fluvial con lavanderas
Lavar la ropa es un importante servicio higiénico en el entorno doméstico, que siempre ha estado en manos de las mujeres, como las de la imagen, lavando en grupo a la desembocadura del río Pumgwe, donde tienden la ropa a secar sobre las matas y a blanquear sobre la arena. Cada colada puede requerir uno o dos días de trabajo.
En Mozambique solo el 51% de la población total tiene acceso a fuentes de agua potable, y solo un 21% a sanitarios mejorados.
Higiene doméstica: lavadero urbano
A partir del siglo XIX, se extienden los lavaderos comunales, como el de la imagen, utilizados tanto en núcleos rurales como urbanos hasta la llegada del agua corriente a las casas.
En las últimas décadas se han reconstruido o modernizado muchos lavaderos rurales, algunos de los cuales siguen ocasionalmente en uso, como el de Combarros
Higiene doméstica: lavando en el regato del pueblo
“Paso río, paso puente, siempre te encuentro lavando”: la imagen de las mujeres lavando se ha reflejado en numerosas pinturas, fotos y canciones populares – como la reseñada. En muchas áreas del mundo rural español el agua corriente llegó a los domicilios en las décadas de los años sesenta y setenta del siglo XX. Hasta esas fechas, las mujeres iban a lavar a regatos, ríos o lavaderos.
Tradicionalmente, las mujeres hacían el jabón en casa y utilizaban para blanquear la ropa la ceniza procedente del horno donde se cocía el pan
Higiene doméstica: lavando lana para producción artesanal
En pueblos con importante industria textil artesanal, como Val de San Loremzo (León, España), las mujeres también debían lavar la lana en el río, como se ve la imagen. En muchos otros pueblos, la lana que lavaban las mujeres era para consumo doméstico, destinándose en su mayor parte para confeccionar prendas de abrigo para la familia y, cuando se celebraba alguna boda, para hacer los ramos de boda tradicionales para la celebración.
En Val de San Lorenzo queda una última artesana con telar tradicional, así como un reducido número de pequeños artesanos industriales.
Higiene doméstica: ropa limpia y desinfectada
En 2015 el 85% de la población marroquí tenía acceso al agua, con importantes diferencias entre el medio rural (el 66%) y el urbano (el 84%). El 75% de la población tenía disponibilidad de servicios sanitarios en el conjunto del país.
En la imagen, tomada en el Alto Atlas pero que es universal, las mujeres socializan lavando, siempre rodeadas de niñas y niños. En un recipiente metálico con fuego debajo (que puede apreciarse parcialmente detrás del niño que mira a cámara) se hierve agua con ceniza para blanquear y desinfectar determinadas prendas.
Higiene infantil: lavar pañales
En los pueblos del Alto Atlas marroquí, al nacer un nuevo bebé, las hermanas mayores con seis años o más asumen el cuidado del penúltimo nacido.
La responsabilidad que asumen implica lavarles los pañales, darles de comer y llevarlos a la espalda. El peso medio de una niña de seis años está en torno a los 18 kilos y el de un bebé de dos años en torno a los 12, de tal manera que cuando los llevan a la espalda las hermanas aguantan un peso que representa más del 66% del suyo propio.
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