viernes, 24 de julio de 2020

Lavaderos públicos de Potríes

llavador-de-la-iglesia-poitres

Fotografías realizadas el día 13 de julio de 2020 por Antonio Domènech en Potríes, municipio perteneciente a la provincia de Valencia, en la comarca de la Safor. Comunidad Valenciana

llavador-de-la-iglesia-poitres

La población cuenta con dos lavaderos públicos

Llavador de la Iglesia

Antonio nos comenta:
“Bon día Juan, te mando el primero de los dos lavaderos que encontré en Potries (Valencia). Se localiza en la calle Boamit, junto a la fachada posterior de la iglesia. El lavadero no cuenta con ningún tipo de techumbre, es abierto, el agua se la suministra la acequia del Rebollet, que viene del partidor de la Casa Fosca”

llavador-de-la-iglesia-poitres

llavador-de-la-iglesia-poitres
Casa Fosca

llavador-de-la-iglesia-poitres
Sequia del Rebollet


Segundo llavador

Antonio nos comenta:
“Bon día Juan, aquí tienes el segundo lavadero de Potries (Valencia) El lavadero se localiza en el cruce entre las calles Llavadors y Corts Valencianes. El mismo está cubierto a un agua, recientemente rehabilitado, el agua se la suministra la acequia del Rebollet, que viene del partidor de la Casa Fosca (oscura)” 
lavadero-potries

lavadero-potries

Texto extraído del cartel informativo que hay junto al lavadero:


LAVADERO PÚBLICO
lavadero-potries
Los lavaderos públicos aparecen en la segunda mitad del siglo XIX, en unos momentos en que la población empieza a preocuparse más de la higiene y necesita de recintos apropiados para poder hacer la colada. Aunque, en el caso de Potries, también encontramos un número considerable de lavaderos privados en las casas situadas junto a la acequia del Rebollet, a su paso por el pueblo. Un conjunto arquitectónico y etnológico de nuestro paisaje urbano, típico y definidor del uso del agua en los últimos siglos
Hasta la década de los años 60 del siglo XX, había en Potries cuatro lavaderos públicos, de los cuales solamente se conserva éste. Todos ellos aprovechaban el curso del agua conducida por la acequia del Rebollet y las losas de piedra, para lavar la ropa o fregar los platos, se situaban inclinadas hacia el interior, coronando uno de los muros de la acequia. Tanto este lavadero, como el situado junto al edificio de la iglesia, disponían de una estructura cubierta y un nivel más bajo que la cota del muro de la acequia, para evitar que las mujeres se arrodillaran y pudieran lavar derechas. Mujeres con lebrillos y cubos, llenos de ropa o vajilla, charlaban amistosamente y se ponían al día en los lavaderos, y con un poco de tierra, jabón y el agua de la acequia lavaban sábanas y camisas, pucheros, platos y cazuelas.


“HACER LA COLADA”.

lavadero-potries
La colada constaba de 4 fases: el remojado, el hervido, el aclarado y el secado, extendiéndola ropa; generalmente el secado era la fase más laboriosa, sobre todo las sábanas de hilo o las camisas de dormir.
En un barreño se mezclaba agua hervida con mucha ceniza y el líquido resultante se denominaba “lejía”, con el cual se remojaba la ropa para blanquearla, dándole un olor agradable y característico. Después la ropa se dejaba reposar, a veces toda la noche, y se llevaba al lavadero otra vez, donde se aclaraba y se extendía para secarla.
El jabón se hacía tradicionalmente en las casas utilizando cenizas, grasas de animales o aceites vegetales. En la segunda mitad del siglo XIX el químico belga Solvay descubrió el método para obtener sosa a bajo precio y desde entonces se industrializó el proceso de fabricación del jabón, popularizando su uso. El jabón se hace con sosa cáustica, agua y aceite de oliva
lavadero-potries

lavadero-potries
Casa Fosca


No hay comentarios:

Publicar un comentario